Una selección muy sabrosa para desayunar. Habitaciones soleadas y ordenadas con unas vistas fantásticas. - Una cama cómoda y además una vista espectacular. - Una piscina muy bonita. - En general un lugar bueno y estupendo.

Las habitaciones con unas vistas fantásticas y 2 camas separadas y también un balcón. Ubicación cerca de varios lugares, como la isla y el océano.

El hotel está situado lejos del jaleo y el alboroto, la habitación es muy ordenada, por lo cual me ha gustado todo. Tiene camas grandes y una nevera y un radio en la habitación. Hay una bañera en el baño. La ubicación es buena y estupenda muy cerca del mar, del centro de la ciudad y de las montañas, no podría ser mejor. A 3 km se encuentra la Levada Prazeres.

Me encantó la decoración del hotel Tarmarplace en Jardim do Mar. Era muy acogedora y tenía un toque tradicional que me hizo sentir como en casa. Además, las áreas comunes estaban muy bien cuidadas y limpias. Fue muy fácil para mí, como una mujer mayor, moverme por el hotel, ya que estaba bien adaptado para personas mayores como yo.

Me hubiera gustado que hubiera más actividades o servicios orientados a personas mayores en el hotel. Aunque el personal era muy amable, sentí que no estaban completamente preparados para atender a huéspedes mayores.

Un lugar estupendo, un hotel muy limpio. Habitaciones enormes con un balcón y vistas fantásticas. - Cama cómoda. - Personal absolutamente agradable. - Terraza con buena comida. - Ubicación cerca del centro y de la montaña.

El hotel está muy cerca del mar, lo que ofrece unas vistas impresionantes desde algunas habitaciones. Las instalaciones son modernas y limpias, y las habitaciones están bien equipadas. El servicio es atento y amable, y el desayuno es aceptable.

El acceso a algunas habitaciones puede resultar incómodo y complicado, ya que hay que pasar por varios pasillos y escaleras.

Durante mi viaje de negocios a Jardim do Mar, nos alojamos en el TarmarPlace, un hotel que fue elegido por nuestro director. Una de las cosas que más disfruté de mi estancia fue la proximidad a las famosas "Levadas", senderos para caminar que también son considerados una de las 7 maravillas naturales de Portugal. Estos senderos forman parte del paisaje y están clasificados como Patrimonio Mundial por la UNESCO. Además, el hotel cuenta con una piscina al aire libre abierta todo el año y ofrece vistas al mar. tuve la oportunidad de nadar si así lo deseaba, lo cual fue una experiencia refrescante.

Este hotel en un pueblo encantador ofrece una gran vista al mar desde las habitaciones con balcón. El desayuno está incluido y es fantástico, con una amplia variedad para elegir. Además, el personal es amable y atento, asegurándose de que los huéspedes disfruten de su estancia.

Todo estuvo perfecto.

La atención fue excelente, la ubicación cerca del océano y las montañas es maravillosa, el paseo a Enseada solo tomó 10 minutos caminando.

Personal amable, hermosas vistas al mar, facilidades para familias con bebés, desayuno completo, piscina estupenda.

Casi perfecto.

Personal atento, facilidades con bebé, desayuno completo , piscina y vistas estupendas, buena ubicación.

Imposible encontrar algo.